Recordar es Vivir
Por: Juan Carmona
Redacción Zarzal
Con este slogan “recordar es vivir” o haber vivido, el profesor Álvaro Villafañe expresa su clamor porque cada día se aleja más de los zarzaleños: el futbol, donde un municipio con más de 42.000 habitantes pasamos en menos de 30 años de 7 canchas reglamentarias a solo 2, la cancha Marco Fidel Salamanca, hoy en reparación, y el estadio Noel Mazuera, politizado.
El profe realiza este clamor que aún no recibe eco, a través de dos libros y tres revistas alusivos al dorado del futbol en el municipio de Zarzal, donde él hace unas remembranzas de este deporte a través de equipos y jugadores que hicieron llorar, reír y gozar a través de tardes deportivas bañadas en futbol sin distinción de clase, color político o racial, a un pueblo que se ha quedado en la historia deportiva con simples polideportivos, olvidándonos que fuimos potencia en futbol a nivel departamental y nacional.
Álvaro Villafañe nació en el municipio de Zarzal el 1 de noviembre de 1944, hijo de Pedro Pablo Villafañe e Isabel Villafañe; casado con Olga Lucia, de cuya unión llegaron 3 hijos: Nelson Fabián, Beatriz Eugenia y Bertha Lucia; hizo sus estudios primarios en la escuela General Santander y el bachillerato en el colegio Simón Bolívar, después empezó a ejercer la profesión de docente donde a cada grupo de quinto año consecutivamente inculcó la necesidad de tener un equipo de futbol en el salón.
Este amor por el deporte se vio reflejado a través, no sólo de enseñar a los niños el futbol, sino de jugarlo personalmente desde el año 1957 hasta el 2011, en diferentes clubes deportivos que hoy son historia: Racing, Nacional, Chacarita Juniors, La Despensa, CVC, Los Cloclies, Vallejuelo, 11 amigos y San Lorenzo, respectivamente.
Ya no juega al futbol, pero a su edad sufre por la falta de canchas deportivas donde exponer este bello deporte que florece en otros municipios, pero que en Zarzal cada día desaparece, porque faltan dirigentes menos políticos y más entregados a la causa deportiva.
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