Por: Álvaro Aguirre Castaño
Redacción Sevilla
Guillermo Antonio Arbeláez Orozco, es el Notario Primero, circulo de Sevilla Valle del Cauca, oriundo de Caicedonia “la ciudad centinela del Valle”. Este vecino que hoy nos acompaña a los sevillanos desde hace cinco años, trae a colación lo que para él es otro de sus compromisos, pintar, y nos enseña el cuadro que pintó hace menos de una semana.
Guillermo, ante todo se considera un artista, sus primeros trazos en la pintura los aprendió desde niño, es autodidacta en el estudio de las obras pictóricas del arte universal; asistió a talleres de pintura en Bogotá, donde vivió por varios años, allí conoció a una profesora de pintura de la Universidad Nacional, que le enseñó algunas técnicas valiosas en este arte.
En la vasta obra pictórica de Guillermo Antonio Arbeláez Orozco, notamos la influencia y admiración por los pintores Fernando Botero, Pablo Picasso, creador del movimiento cubista; y Vincent Van Gogh, exponente del postimpresionismo.
Nos cuenta este notario juicioso, que vive su faena diaria entre libros de protocolo, que es un gran devoto de San Ivo, el santo de los notarios y a la vez el patrón de los abogados; San Ivo se llamaba Yves de Helori y nació en el año 1253 en Kermatin, una pequeña aldea de Bretaña y a los 14 años entró a estudiar a la Sorbona de Paris, fue un hombre demasiado estudioso y humanitario con los desvalidos y un gran administrador de justicia, su principal festividad se celebra el 19 de mayo y el 2 de octubre, el día del notario.
Este pintor que es Notario, o este Notario que es pintor, es hijo de doña Paulina Orozco de Arbeláez, y de don José Miguel Arbeláez, caicedonitas todos.
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