7.05.2009

Secretario de seguridad municipal preocupado por drogadicción en Andalucía

Aunque hasta hace poco no se pensaba que los hechos lamentables donde la juventud venía siendo objeto de toda clase de abusos y vejámenes por parte de la población adulta, pudieran salpicar la comunidad en el municipio de Andalucía, luego de análisis, estudios e investigaciones, se ha logrado constatar que el flagelo de la drogadicción se viene metiendo entre los muchachos como una honda de energía, pero en este caso totalmente negativa.
Así lo dio a conocer al Semanario El Periódico, el profesional Moisés Prado Trujillo, Secretario de Seguridad Municipal, quien en sus propias palabras manifestó que no cabe duda que últimamente los jóvenes están consumiendo toda clase de sustancias alucinógenas a escondidas de sus padres, lo que cada vez resulta ser un agravante, que de no cortarse de raíz, dominará todos los esquemas sociales implementados por los gobiernos municipales de turno; y que desafortunadamente para la actual administración, resulta ser una camisa de fuerza.
Ante esto se está trabajando conjuntamente entre los líderes cívicos, comunales, fuerzas vivas, empresarios, comerciantes, padres de familia, docentes, directivos académicos, el cuerpo administrativo municipal y por supuesto la policía como entidad de protección del Estado.
"Lamentablemente debemos denunciar públicamente esta situación", manifestó el funcionario Moisés Prado Trujillo, "pero ya es una realidad que no podemos tapar ante los ojos de las personas, y que por el contrario, debe servir como tema de reflexión para los padres de familia, a fin de que se enteren sobre el paradero y las andanzas de sus hijos".
No quiere decir esto que todos los jóvenes y muchachos en Andalucía caminan en el mundo de las drogas, pero que sí existe un grueso número de ellos que se han dejado ilusionar por unos falsos profetas de la economía y de la buena vida sin tener que trabajar, llevando a su paso estos incautos muchachos.
En materia de política social incluyente, la administración del Doctor Albeiro Sepúlveda Grajales, ha venido jalonando un proceso muy edificador, pero se requiere del apoyo de los padres de familia, los docentes y directivos, quienes desde su actuar, contribuyen notablemente en la reducción del flagelo.
Los jóvenes tienen en sus manos la decisión de plantarse en la raya y decir no más a este falso y vano mundo de la drogadicción, y asumir una posición responsable para con ellos, la familia y la sociedad que en últimas será quien enjuiciará el actuar de estas personas y de quienes les han inducido en las drogas.