Redacción Regional
El Periódico
Tras una auditoría integral de modalidad especial, la Contraloría Departamental estableció que las finanzas públicas del Valle son insostenibles mientras se continúe en la categoría especial y no en la primera, que sería lo ideal.
El contralor José Ignacio Arango Bernal, indicó que aunque el departamento figura fiscalmente en categoría especial “durante los últimos cuatro años ha operado en categoría primera, toda vez que sus gastos de funcionamiento han superado el 50 % de sus ingresos corrientes de libre destinación”, hoy son del 52,20 %.
La categoría especial exige que esos gastos de funcionamiento sean inferiores al 50%, según la Ley 617 del 2000, aclaró.
Según Arango Bernal: “este hecho viene afectando la estabilidad financiera del departamento, debido a que lo comprometió a alcanzar metas superiores de recaudo tributario y por encima del promedio histórico, lo que podría llevar a un incumplimiento de los compromisos en gastos fijos y colocaría en riesgo el Acuerdo de Reestructuración de Pasivos (Ley 550), bajo el cual está el Valle”.
Con base en la categoría especial, el departamento proyecta un crecimiento del 16,47 % en los ingresos corrientes de libre destinación para el 2016, cuando el promedio ha sido de un 3 %. En el 2015 estos ingresos apenas aumentaron en 0,18 %, recordó el Contralor.
Tales ingresos, de acuerdo con el presupuesto del departamento para la vigencia del 2016, serían de $456.245 millones, mientras los gastos de funcionamiento se proyectaron en $226.023 millones para alcanzar un indicador del 49,54%, que según el Contralor sería difícil de cumplir.
A finales de mayo estará lista una auditoría integral a las finanzas del departamento, lo que permitirá conocer su realidad.
Arango Bernal envió un informe a la Gobernadora Dilian Francisca Toro, con varios hallazgos fiscales que se detectaron durante la auditoría especial y que corroboran la situación de las cuentas públicas del Valle.
“Si el departamento baja a la categoría primera podrá elevar hasta en un 55% sus gastos de funcionamiento y tener mayores recursos para inversión”, resaltó el Contralor.
Hoy, los gastos de funcionamiento del Valle son del 52,20 % de sus ingresos de libre destinación, superando lo que dice la Ley 617 que impone un límite del 50 %.
El funcionario puso de presente que esa recategorización es indispensable para la sostenibilidad financiera del departamento.
“Al clasificarse el departamento en una categoría superior, que no es la real, se incumple con la Ley 617. Las metas de recaudo que se han proyectado son más del doble frente a los registros históricos”, indicó Arango Bernal. Eso es inalcanzable, puntualizó el funcionario.
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